Padres e Hijos
Cinco consejos para padres tecnológicamente desesperados
No deje pasar tiempo y eduque a sus hijos sobre el uso de las nuevas tecnologías, antes de que sea tarde y cometan graves errores
Día 14/11/2012 - 12.52h
Según los últimos estudios, desde los once años comienzan
los menores a utilizar con cierta regularidad internet y las redes
sociales. De esto se deduce que la privacidad y la seguridad en la red
debe ser un tema relevante en la formación de los menores. Labores de
formación, prevención, protección y educación son fundamentales.
Internet es un difusor de información muy potente y con mucha memoria. Desde Prot-On
(Protección Online S.L.) recomendamos a los padres que aprendan a
valorar y educar en la cultura de la privacidad, y ofrecemos algunos
consejos prácticos para padres desesperados, tecnológicamente hablando:
1.—Fórmate e infórmate antes de hablar con tus hijos.
Existen multitud de páginas que pueden ayudarte a conocer mejor la red y
su implicación con la imagen de los menores (www.pantallasamigas.com,
www.cuidatuimagenonline.com...).
2.—Enseña a tus hijos menores a configurar y
prestar atención a las opciones de privacidad de las páginas en las que
se registran. Presta especial atención al proceso de alta, las
condiciones que se plantean en el mismo afectan a cómo y dónde pueden
ser usados nuestros datos, así que te recomendamos una lectura
detallada.
3.—Ayudales a proteger sus datos personales en todo momento,
y a mantener una actitud activa y proactiva en defensa de la
privacidad. Recomiéndales que supervisen lo que se publica sobre ellos, y
que ejerzan llegado el caso, sus derechos a eliminar datos personales
de determinadas páginas (el etiquetado en las fotografías es un elemento
con el que tener mucha precaución).
4.—Aconseja a tus hijos la utilización de herramientas con las que controlen en
todo momento la información que envían a internet (fotos y documentos
puede ser protegidos desde el inicio con aplicaciones como Prot-On,
con la que sabrán en todo momento quién accede a sus documentos, y
podrán bloquear el acceso a los mismos incluso después de haber sido
enviados).
5.—Infórmales sobre el uso de la webcam.
Lo que envía la webcam puede ser grabado al otro lado. Es algo evidente
pero que con frecuencia desconocen u obvian los adolescentes. No piensan
que esa secuencia puede ser grabada y que, por lo tanto, cualquiera
puede llegar a verla. Es el clásico modus operandi en los casos de
grooming donde, una vez obtenida y grabada esa imagen o secuencia
comprometida, se suele desembocar en un chantaje a los menores.